lunes, 31 de diciembre de 2007

Quien amenaza a quien


Me sorprende la capacidad de adoptar los eslóganes más mentirosos por parte de gente de mi Iglesia. Se dicen demasiadas tonterías sobre que la familia cristiana está amenazada. Pero ¿Quién la amenaza? ¿Cuál es la verdadera amenaza?
¿Es el matrimonio gay una amenaza para la familia cristiana? Pues yo no lo tengo nada claro. Nunca he podido explicarme como una pareja homosexual puede actuar sobre una pareja heterosexual y amenazarla. Es que no se me ocurren más amenazas que o bien es que les ponen aceite por la escalera o es que les tiran piedras por el patio. Si desde luego un matrimonio cristiano se rompe porque está al lado un matrimonio gay como vecinos, joder, que delicadeza. ¿Pero eso no podría ocurrir aun sin que esa pareja homosexual vecina no se hubiese casado? Yo es que me muero por la curiosidad de observar tal fenómeno.
Dicen que el matrimonio gay devalúa el matrimonio. Digo yo que el matrimonio que devaluará será el civil. Pero ¿cuando se casó Doña Leticia Ortiz ¿no se dijo que para la Iglesia el matrimonio civil no significaba nada? Pues parece que ahora les preocupa, después de que meses antes de casarse varios prelados dijeron lo poco que les importaba que fuese una divorciada por lo civil, que eso no vale nada. Pues si dos homosexuales se casan por lo civil ¿Qué les importa?
Pero a mi me interesan las amenazas, ¿dónde están? Pues sencillamente no existen. Y si creen que una ley de matrimonio gay o de divorcio express amenaza el matrimonio cristiano, pues van de cráneo. Si dos no se soportan o no quieren seguir juntos, por mucho que no quieras darle el divorcio, se irán cada uno por su lado. Si en tiempos de Franco esto casi ni ocurría es porque una mujer no tenía generalmente donde caerse muerta.
Pero tras convocar dos manifestaciones en defensa de una familia que creen en crisis y ven amenazadas, se esconde un deseo de amenazar a otras familias. No se engañe nadie, aquí la única familia que está seriamente amenazada en este país es la familia formada por dos personas de idéntico sexo. Esto no se puede negar, y más con unos prelados que despotrican contra una ley que reconoce los derechos de gays y lesbianas, con personas en mi Iglesia que también piensan igual y que hay que ilegalizar esa unión y con un recurso contra la ley en el tribunal constitucional. Pues a mi me gustaría saber como aun así se atreven a decir que la familia cristiana está amenazada cuando son ellos, mis obispos y muchos compañeros en la Fe, los que amenazan a otra forma de familia distinta.
Hasta ahora no he visto actos de colectivos LGTB pidiendo la derogación del matrimonio cristiano, si existiera, que desde luego sería un disparate, habría salido en los medios de comunicación. Pues no he observado nunca manifestantes, instituciones gubernamentales, partidos políticos, colectivos, ONGs, etc, que vayan pidiendo destruir el matrimonio religioso. Por tanto que no se inventen amenazas.
Me gustaría exigirles a los obispos que dejen de hacer el canelo, que esta batalla está perdida, y si alguna vez obtienen u han obtenido una victoria, les durará bien poco. Carecen de argumentos convincentes para convencer a la mayoría de la gente de este país, y les pido que hagan el favor de callarse porque a mi no me da la real gana como cristiano que soy de convertirme en una amenaza contra nadie, o que otros por mi condición cristiana me vean así. Tengamos la fiesta en paz.
Y termino diciendo que si tan seguros están que está en peligro la familia cristiana, no creo que ese peligro, que yo por supuesto no veo, se vaya a salvar convocando una manifestación o un acto multitudinario. A la familia no se la apoya con manifestaciones, se la apoya con ayudas económicas, con el cuidado y educación de los hijos. Y se enseña muy bien a ser familia cristiana si se enseña lo que es la palabra respeto, tolerancia y perdón, que muchas veces faltan en muchas familias, las cuales acaban separándose, divorciándose o viviendo toda clase de desavenencias. No estaría mal que además ustedes pidiesen para las familias ayudas económicas ante las duras hipotecas, ante la creciente inflacción, una mejora en los salarios y flexibilidad laboral, desde luego eso es lo que amenaza a cualquier familia, y ante eso ustedes callan y no convocan ninguna manifestación.

martes, 25 de diciembre de 2007

He visto el Cielo.


Ayer lunes regrese de Madrid después de estar siete días de descanso que bien merecidos los tenía y a su vez los deseaba como agua de mayo.

Todo vuelve a la normalidad, a la monotonía, al trabajo, etc.,

Los días que he pasado en Madrid han sido maravillosos. Durante mi estancia en Madrid, tuve tiempo de meditar detenidamente varias cosas a las cuales sigo todavía dándole vueltas.

Por otro lado debo decir que me sorprendió enormemente durante mi estancia en Madrid,  que la comunidad de Sonsoles celebrara mi cumpleaños. Fue algo que no me esperaba y agradezco el gesto que ha hecho esta comunidad. Doy la gracias a Pepito, Juan, Mateo, Pepita, Raul, Manix, Mario, etc., por vuestra calurosa acogida y por cuanto habéis hecho por mi. ¡Gracias a todos de corazón por vuestro afecto y cariño!. Que Dios os bendiga y os colme de bendiciones. Me he sentido como uno más en esa casa. Y deseo volver a esa comunidad lo antes posible si Dios quiere.

Por aquí, por Zaragoza, todo sigue igual, nada ha cambiado. Las mismas caras, las mismas personas, los mismos sentimientos, los mismos roces o piques, las mismas diferencias, etc. Como yo digo para mi mismo, de vuelta al infierno.

Pido a Dios que mi estancia en este infierno sea corta. Digo infierno, porque es así como yo lo siento. Y aún no ha venido lo peor, Magallón, pues esta por venir.

Ya no veo el momento de salir de aquí, me gustaría salir inmediatamente, pero tengo que esperar un poco antes de pegar el salto definitivo. Mientras tanto hay que aguantar como mejor se pueda. Hay algunos que no se creen que vaya a dar el salto definitivo, piensa que nunca lo realizare, pero están equivocados. Mi decisión ya esta tomada y es irrevocable, tengo que salir lo antes posible. Sólo debo de tener un poco de paciencia, nada más.

Si por lo que fuera, si por circunstancias de la vida, no puedo pegar el salto y tengo que quedarme aquí fijo, creo que me moriría. Esperemos que todo salga según se lo previsto y pueda incorporarme en la sociedad como he decidido.

Os deseo a todos unas Felices Fiestas y un prospero año nuevo 2008.

sábado, 22 de diciembre de 2007

Hoy cumplo 34 añazos


Hoy día 22 de Diciembre es mi cumpleaños. 34 añazos son los que cumplo y un año más de vida que tengo.

Al cumplir un año más de vida me he hecho una propuesta y es que voy a intentar pulir ciertas aristas de mi persona e intentar madurar en algunas cosas. Aunque hay una frase de alguien que ahora no me acuerdo que dijo: "Madurar es un proceso de malas experiencias, bien asimiladas". Espero que durante este año pueda asimilar ciertas contrariedades que la vida me presente como también saber aguantar ciertos defectos de personas que no son de mi gusto.

Siempre que cumplo años es como si volviera a nacer de nuevo. Así es como yo lo siento.

Bien es cierto, y no se porque razón, siempre que cumplo años tiendo a olvidar todo lo malo durante el año que a pasado. Borrón, y cuenta nueva.

A ver como se nos presenta el 2008 y espero poder sobrellevar este año lo mejor posible con todo lo bueno y todo lo malo que el año me depare.

sábado, 15 de diciembre de 2007

Me voy a Madrid 7 días


Esta mañana me despertó el móvil. Era Jorge llamándome, pero yo no hice ni caso. Al final ya me quito el sueño y me levante.

Cual es mi sorpresa cuando al levantarme y mirar el móvil me encuentro con un SMS de Juan. Lo miro detenidamente y viene decirme algo así como que me invitaba a Madrid y me pagaba el viaje de ida y de vuelta a Zaragoza.  Yo en un primer momento pensé que mi amigo se había equivocado de número al enviar ese SMS, pero luego más tarde y después de hablar con él, me comento que ese mensaje en el móvil iba para mi, no para otro y que el motivo era celebrar mi cumpleaños que es el Sábado día 22.

Inmediatamente consulte a mi compañero, a Jorge, si había algún problema en que me ausentara de Zaragoza por una semana. Su respuesta fue que llamara a José Antonio (el gran jefe), y se lo comentara, ya que al fin y al cabo es él quien tiene la ultima palabra. Llamo a José Antonio y como es habitual en él, me da un si pero con condiciones. Es decir, a cambio de que cuando se vaya Paco, yo sustituya a Paco y a su vez haga la labor que hace y que los que estamos en Zaragoza nos hagamos cargo totalmente de la mudanza que tenemos que hacer, ya que para antes del día 24 de enero tenemos que dejar el chalet vacío, ya que hay un desahucio forzoso por impago de rentas. Cosa que a estas alturas de la vida no me sorprende en absoluto. Siempre hemos estado gastando más de lo que recaudábamos. Y el ir así por la vida es imposible para cualquier persona. Pero por otro lado se niegan a reducir gastos. Pero bueno, ellos sabrán lo que hacen que para eso son ya mayorcitos. Bien es cierto que llegara un momento en que nos demos un batacazo de órdago y a partir de ese día que cada uno se solvente su situación personal como pueda y entienda. Mientras tanto a seguir forzando la situación hasta el limite y como es habitual en esta entidad.

En resumidas cuentas y cambiando de tema radicalmente digo que el lunes día 17 me marcho para Madrid y hasta el domingo 23, no regreso a Zaragoza. Y que me quiten lo bailao.

Algún envidioso que otro se lo llevaran los demonios de ver que me marcho una semana y empezara a echar maldiciones y hablar mal de mi. Es como si lo viera. Como dice Jorge mi compañero, "si la envidia fuera tiña, andaríamos todos teñidos". Jamás he visto una enfermedad tan mala como la envidia. Pobre de la persona que la padece, porque es como si fuera un cáncer. No te deja vivir a gusto, ni tranquilo. Y tampoco deja vivir a las personas que rodean a ese envidioso. Así que, si alguno hay y habrá más de uno, que la envidia le roe las entrañas, que se pegue la cabeza contra la pared unas cuantas veces.

jueves, 29 de noviembre de 2007

Un hombre muere tras explotar la batería de su móvil


Publico una noticia que he recogido del portal de terra y que me ha llamado poderosamente la atención.

Desde luego a donde vamos a llegar.

Ahora resulta que los moviles también sirven para matar.

Bueno, reproduzco integramente la noticia:

Un hombre de 33 años fue encontrado muerto presumiblemente a causa, al parecer, de la explosión de la batería de su móvil, en el primer caso de este tipo ocurrido en Corea del Sur, informó la policía a la agencia surcoreana Yonhap.

El hombre, al que la policía identificó únicamente por su nombre, Sur, fue encontrado muerto por sus compañeros de trabajo en una cantera de la provincia de Chungcheong del Norte, donde trabajaba como operario.

Un compañero suyo dijo que cuando se acercó a una colina para colocar una carga de dinamita encontró al hombre tumbado, al lado de una pala mecánica.

'Estaba sangrando por la nariz y tenía un móvil con la batería derretida en el bolsillo izquierdo de su camisa', afirmó el compañero de trabajo de la víctima.

El profesor de la Universidad Nacional de Chungbuk, Kim Hoon, dijo tras examinar el cadáver que la muerte estuvo causada por la explosión de la batería del móvil, indica Yonhap.

Según el profesor, 'sufrió heridas en la zona izquierda del pecho y la explosión le rompió varias costillas y la columna'. Además, el corazón y los pulmones quedaron perforados.

Este fallecimiento supone el primer caso de muerte por explosión de una batería de móvil en Corea del Sur, pero el pasado mes de junio medios chinos recogieron un suceso parecido sucedido en China.

viernes, 16 de noviembre de 2007

La Belleza


En la buena filosofía estudiamos que todo ser, por el hecho de existir, tiene cuatro propiedades ínsitas: unidad, verdad, bondad y belleza.

1. Definición y tipos de belleza

El vocablo belleza deriva del término latino “bellus”, bonito (que a su vez, procede de bonus, bueno). Desde antiguo se destacó la dificultad que entraña dar una definición de este concepto. Platón se propuso en su diálogo “Hipias major” determinar qué es la belleza en sí misma: aquello que hace bellas a las cosas que se nos manifiestan como tales.

Se han dado muchas definiciones: Bello es lo que visto (y no sólo lo conocido), agrada (Santo Tomás). La belleza es el esplendor del orden (San Agustín). Es el esplendor de todas las propiedades del ser reunidos: unidad, verdad y bondad (Jacques Maritain). Belleza es luminosidad. Belleza es armonía. Belleza es orden.

La belleza es la hermosura interior que se refleja hacia fuera. No sólo está el gozo de la vista que contempla la belleza exterior y se recrea en sus líneas. La capacidad para descubrir la otra, la interior, indica una facultad más elevada, la de de ser exploradores de la intimidad ajena, lo que a la larga va a ser una valiosa adquisición o valor.

Hay tres tipos de belleza. Con un ejemplo te quedarán más claras. Era el mes de mayo. Soplaba aún un viento fresco, pero la primavera había llegado; así lo proclamaban las plantas, los árboles, el perfume de las flores y el gorjeo alegre de los pájaros. Entré en una inmensa catedral gótica, con sus rosetones maravillosos, con sus arcos de medio punto. De repente suena el órgano el Mesías de Haendel y sus potentes armonías se difunden por las anchas y altas naves. Quedé extasiado. En las naves laterales colgaban pinturas de Rafael y Miguel Ángel, que me trasportaban con su encanto. En esto, a diez metros delante de mí una madre tenía entre sus brazos a su hijo, a quien cada diez segundos le daba un profundo beso en la carita. Me acerco al altar. Comenzó la misa. Ya las primeras bancas estaban ocupadas. Me quedé en un costado de pie. Al rato llegó una pobre anciana, apoyada en un bastón. No había asiento. En esto un señor de unos cuarenta años se levanta y cede su asiento a la ancianita. Escucho atento el sermón del sacerdote y todo era claro, estructurado y brillante. Termina la misa y salgo a la calle. Todo olía a primavera. Y todavía rondaba en mi mente una pregunta: ¿qué es la belleza? Pero hoy me sentí enriquecido.

Ahora ya podemos definir los tipos de belleza.

a) La belleza natural: Es la belleza que se encuentra en las cosas de la naturaleza. Un paisaje, el vuelo de un pájaro, unas cataratas, unas montañas, el mar, unas nubes, etc. Su fuerza radica en entrar por los ojos, en ser rotundo a la hora de mostrarse. Esta belleza natural es fuente de agrado y complacencia para los sentidos exteriores. Va de fuera para adentro. Me enriquece. Me ennoblece.

b) La belleza artística, es decir, la plasmada en el arte: Es la belleza de un hermoso cuadro, un edificio, una escultura, una pintura, un discurso. El Renacimiento se encargó de transmitirnos un nuevo estilo de belleza basado en la armonía y el orden, canon que cambiará en los siglos XVII (Barroco) y XVIII (Ilustración y Neoclasicismo). Esta belleza artística quedará reflejada en las artes plásticas (arquitectura, escultura y pintura) y en las artes del movimiento (música, coreografía y poesía). También es una belleza que va de fuera para adentro. Nos exalta. Nos enriquece y ennoblece.

c) La belleza moral o interior: es el orden, el equilibrio, la bondad interior de la persona. Es el conjunto de unidad, verdad, bondad, espiritualidad en armonía, orden, proporción...que cada uno de nosotros tiene en su interior. Es la armonjía entre las acciones del hombre y el ideal de su vida (ideal que decide su vocación y su misión en la misma). Es la coherencia entre la conducta del hombre y la meta o ideal que persigue. Albert Einstein dijo: “La belleza reside en el corazón de quien la contempla”. Esta es la belleza en la que nos detendremos. Es la belleza que uno tiene dentro como fuente para saciar la sed propia y la de los demás. Llega a ser fuente de alegría constante, de gozo consolador, de encanto arrebatador. Genera amor y alegría renovada en quien la contempla y se beneficia de ella, en el trato con esa persona. Esta belleza interior se exterioriza en resplandores de bondad, veracidad, honestidad, coherencia, simplicidad, encanto, armonía, equilibrio. Por eso, una persona será bella interiormente en la medida en que viva y se alimenta de las otras cualidades del ser: unidad, verdad, bondad.

2. ¿Cómo llegar a descubrir nuestra belleza interior?

En la medida en que somos capaces de olvidarnos de nosotros mismos para interesarnos por los demás y sentimos la necesidad interior, acuciante, aunque serena, de contribuir con nuestra via y nuestras obras a hacer de este mundo un lugar mejor, más hermoso y gratificante para todos...en la medida en que dejemos de inquietarnos por las necesidades más bajas de supervivencia y de seguridad que se cubren de forma automática y nos elevemos sobre lo material, perecedero y terrenal, para entrar en el área inconmensurable, llena de luz y de esperanza del espíritu...en esa medida comenzaremos a apreciar en nuestro interior que tenemos verdad, bondad, espiritualidad y belleza, y las sentimos y vivimos con plenitud en lo más profundo de las estructuras que conforman nuestra mismidad.

Por tanto, esta belleza interior está en ti y es la unión de verdad, bondad, espiritualidad. Es un valor que se autogenera en todo aquel que sepa sentirla, vivirla, sintonizarla y crearla en su derredor. Hay que descubrirla, pues está en ti. Que no te pase que mueras sediento de sed, teniendo a tu lado esta fuente inagotable. Así lo expresaba Leon Bloy: “Hay una fuente al pie de todos aquellos que mueren de sed”.

Pero además, esta belleza interior se ha alimentado de esa belleza natural y artística y es un valor universal que se da en todos y que funde en abrazo espiritual y entusiasma por igual al fílósofo, al poeta, al campesino y al científico. Es el caso del místico san Juan de la cruz, o de san Francisco de Asís, que encuentran a Dios (el porqué de su existencia) en la candidez y belleza de los seres sencillos de la creación, o el caso de sabios como Einstein, anonadado y perplejo ante la maravillosa armonía que descubre en el Universo, o el caso de un sencillo labrador como san Isidro, que siente interiormente el pálpito de la belleza de los campos arados, de las mieses, de la lluvia, del sol y de la escarcha, y contemplándola se siente transportado en espíritu hacia su Creador. Gustavo Adolfo Bécquer diría: “El espectáculo de lo bello, en cualquier forma que se presente, levanta la mente a nobles aspiraciones”. Por lo tanto, esta belleza interior se dará en quienes tengan los ojos limpios y el corazón desalojado de preocupaciones y saben abrirse a la belleza que encuentran a su alrededor, esparcida en la creación.

Esta belleza sentida en el interior como armonía que sintoniza con todo lo creado nos permite descubrir, además, un mundo trascendente que el hombre no es capaz de expresar en términos racionales y que los místicos y poetas se esfuerzan en hacerlo con imágenes poéticas, figuras retóricas, etc.

Pero, ¿por qué hay unos ciegos que no ven esta belleza interior? ¿Por qué otros son capaces de verla en lo más nimio? No hay camino para descubrir la belleza, sino que la belleza está precisamente en hacer el camino hacia el interior del espíritu. La mayoría de los humanos dejan la vida, pasan por la tierra poniendo su empeño en cubrir las necesidades primarias de alimento, pertenencia, aprecio y autoestima, y en su horizonte de miras apenas si han ido poco más allá de capacitarse para ejercer una profesión u oficio, conseguir un nivel socioeconómico aceptable y atesorar propiedades y riquezas con un doble fin: asegurarse unos años de vejez libres de preocupaciones económicas y dejar en herencia a los hijos la seguridad de un patrimonio que alivie las dificultades que la vida pueda depararles. Después, esperar que la muerte llegue lo más tarde posible, y estar orgullosos de haber hecho algo en la vida.

Hasta aquí, todo perfecto, y es digna de elogio la conducta de quienes así programan y realizan la propia existencia. Sin embargo, aquellos, demasiado pocos, por desgracia, que amplían sus miradas hacia el horizonte sin límites de la plena realización de ser, adquieren la inapreciable virtud de convertir en bellos, maravillosos, deseables y dignos de disfrute hasta los momentos más prosaicos y simples de la propia existencia: una merienda en familia, un día de lluvia, el retraso del tren o del subte, el nacimiento de un nuevo hijo.

Los semblantes de estas personas son serenos, calmados, animosos firmes, pero orlados de ternura y de paz. En sus rostros reflejan la alegría, porque han hecho motivo de su existencia el disfrute del encanto y de la belleza que late a raudales en cada rincón de la naturaleza. Gustavo Flaubert dijo: “Si mirásemos siempre al cielo, acabaríamos por tener alas”. Hay que mirar un poco más allá de nuestras necesidades primarias, si queremos descubrir la alas de la belleza, percibir el perfume de la belleza, calentarnos con el resplandor de la belleza y saborear el gusto de la belleza.

Debe ser muy alentador y estimulante para los hombres saber que en cada uno de nosotros permanece la disponibilidad anímica y la predisposición a descubrir la armonía, el orden, el equilibrio y la belleza en todas las cosas de la creación, y que esa sintonía y hermandad con el Universo no es algo que se nos da, sino una riqueza insondable que permanece dentro de nosotros mismos y que sólo hemos de ocuparnos de sentirla, vivirla y disfrutarla.


3. ¿Cómo acrecentar y preservar esta belleza interior?

Necesitamos :

Ánimo equilibrado, mente serena y calma psicofísica. Lo contrario a ánimo perturbado, depresivo y exaltado, angustiado, violento, ansioso, apático, atormentado, esquizofrénico, paranoico, egoísta, vanidoso, orgulloso, pasional, sentimental, inestable, incoherente y mentiroso. Todo esto nos hace perder la belleza interior.

Cada día, antes de iniciar nuestra jornada, mientras nos vestimos y aseamos, debemos poner en orden nuestras ideas, afectos, sentimientos y propósitos, y barrera de nuestro corazón y de nuestra mente posibles residuos de pensamientos y sentimientos negativos de rencores, envidias, venganzas, resentimientos, antipatías y discordias, para dar paso a la armonía equilibradora y saludable del espíritu sereno, que viene acompañada de generosidad, optimismo, comprensión, perdón, actitud mental esperanzada, positiva y de servicio a los demás y predisposición a dejarse invadir por la incomparable belleza de las cosas más pequeñas, cotidianas y aparentemente insignificantes y triviales.

En vano se pretende restablecer el equilibrio perdido y llenar los vacíos del espíritu con honores, posesiones, fama y atesoramiento de bienes materiales, porque la verdadera felicidad es consecuencia de esa armonía interna y equilibradora en cuanto síntesis de bondad, verdad, espiritualidad y belleza, la belleza que es disfrute y gozo en lo cotidiano, vivido y sentido con plenitud del ser.

Albert Einstein dijo: “Los ideales que han iluminado mi camino, y una y otra vez me han infundido valor para enfrentarme a la vida con ánimo, han sido la bondad, la belleza y la verdad”.

Y Rousseau: “Si quitaseis de nuestros corazones el amor a la bello, nos quitaríais el encanto de vivir”.

Y Maurois: “Cuando las cosas no van bien, nada como cerrar los ojos y evocar intensamente una cosa bella”. Una persona amada, una canción, una poesía, un recuerdo hermoso, una vivencia pasada...

CONCLUSIÓN: Ana Frank en su Diario decía: “Volviendo los ojos hacia lo que es bello -naturaleza, el sol, la libertad y la belleza que está en nosotros- uno se siente enriquecido. No perdiendo esto de vista, uno vuelve a encontrarse en Dios y se recobra el equilibrio. El que es feliz puede hacer felices a los demás. El que no pierde el valor ni la confianza no se morirá nunca de pena.

martes, 13 de noviembre de 2007

¿Qué es el Cielo?



La pregunta acerca del cielo surge desde la argumentación de que hay otra vida después de la muerte. Pero, mantener esta separación entre la vida terrenal y la vida del más allá es un error de planteamiento.
El cielo cristiano sólo se puede comprender como la culminación o la plenitud y perfección de una sola vida, la que todos conocemos en este mundo.
No hay dos vidas, ni dos mundos separados por la linde de la muerte física. Cuando Dios crea al hombre le ofrece la vida y sólo eso, es decir su vida, la de Dios mismo. Dios quiere compartir su vida con el hombre, y se la ofrece gratuitamente.
Pero no es un regalo para las postrimerías, es un presente para el hoy de cada hombre. En realidad, no hay nada que esperar para saborear el regalo de la vida de Dios, porque ya le ha sido entregado al hombre desde el primer instante de su creación.
Pensar en el cielo como en una recompensa o un premio a los méritos conseguidos en esta vida, deja a Dios en muy mala posición. La vida no es un concurso, ni una carrera de obstáculos que se deben superar al hilo de los días.
Aquí no hay ganadores ni perdedores. El cielo se le ofrece al hombre desde el primer instante de su nacimiento, y mucho menos es una cuenta hacia atrás, esperando el final de cada historia personal para conseguir la promesa última.
En otras palabras, el cielo está aquí y ahora, en la vida personal de cada hombre, lo sepa o no. Cuando murió Jesús, todos sabían que resucitaría, pero al final de los tiempos, como era normal en la fe de los judíos.
La gran novedad y la sorpresa para todos fue que la resurrección de Jesús aconteciera en el aquí y el ahora del tiempo histórico. De ahí la sorpresa y la incredulidad de tantos.
¿Qué sentido tuvo la resurrección en el presente de Jesús? Precisamente, traer a esta vida la realización de lo que hasta ese momento se creía como algo destinado para el final de los tiempos.
Con la resurrección de Jesús, el cielo como una realidad escatológica se difumina y empieza a ser comprendida y vivida como un regalo de Dios para la vida temporal de todo hombre.
Ya no hay nada que esperar, ni que conseguir, ni por lo que luchar, porque los últimos tiempos se han convertido en los tiempos de ahora, en cualquier momento de la historia espacio-temporal.
Cuando esto se ha comprendido, entonces la vida del hombre adquiere todo su sentido y la felicidad no es algo puntual o pasajero. La felicidad, vista con los ojos de la fe, es algo ya realizado y puesto al alcance de la mano de cualquiera.
Si ya lo tenemos todo, sólo hay que dejarse llevar por la presencia del Misterio de Dios que lo invade todo y es capaz de colmar al hombre de esperanza, alegría y felicidad.
¿Entonces, después de la muerte que hay? Pues más de lo mismo. Es decir, la plenitud de lo que en este mundo ya se ha realizado por anticipado. Darle sentido a esta vida porque después habrá otra mejor, es una falacia.
Si esta vida no tiene sentido para el hombre, entonces, después de la muerte tampoco habrá sentido en seguir viviendo.
La muerte no es una ruptura, sino una continuación a lo que en el tiempo histórico se ha iniciado. En este mundo la felicidad es posible y eso ya es el cielo. El cielo no se gana, se disfruta en el día a día de cada hombre.
Llegar a experimentar esto supone un cambio de mentalidad que pasa necesariamente por una transformación del corazón en uno mucho más gratuito y generoso.
Dios no es una conquista, es una propuesta gratuita y sin condiciones. Y si Dios no le pone condiciones al hombre, ¿por qué se las ponemos a Él?
Por la resurrección de Jesús, el cielo ya está aquí. ¿A qué estamos esperando para disfrutarlo? Quien espera a la muerte para ir al cielo, es que no se ha enterado de nada del mensaje del Evangelio, y se convierte aquí y ahora en un infeliz.
Si no somos felices es porque no queremos, porque Dios ha puesto a nuestro alcance todos los medios para serlo y hacer ya la experiencia del cielo que tan maravillosamente ha irrumpido en la historia del hombre.

Y con esto espero haberte respondido amigo mio a tu pregunta sobre ¿qué es el cielo?

lunes, 12 de noviembre de 2007

Aplaudo al señor Chávez


Hace unos días se produjo un incidente en la Cumbre Iberoamericana sobre el cual me paro detenidamente y hago mis propias conclusiones.

El señor Chávez crítico y le falto el respeto al señor Aznar, cosa que aplaudo, pues lo único que hizo el presidente de Venezuela fue manifestar públicamente lo que mucha gente piensa sobre la figura del señor Aznar, pero que nadie se atrevió nunca a manifestarlo públicamente. ¿Ha habido algún personaje publico en España que haya criticado, y faltado el respeto al señor Aznar?, la respuesta es bien clara, nadie. Pero lo que la gente no ve o no quiere ver es que el señor Aznar tomo a los españoles como tontos, como payasos de circo y como imbeciles, e hizo oídos sordos cuando España entera gritaba ¡NO! a la guerra de Irak. Encima viene de EE.UU. hablando con acento mexicano, paga un montón de dinero para que se le de no se que titulación honorífica, etc. ¿Es o no es una payaso el señor Aznar?, es un verdadero payaso y un deficiente mental en grado supremo y merece toda crítica porque a él le debemos los atentados del 11M, las victimas mortales y todo lo que arrastro tras de sí ese fatídico día. Gracias señor Aznar, por su pésimo gobierno y si por mi fuera le sometería a un consejo de guerra por crímenes contra la humanidad, al igual que al señor Bush, y Blair. Porque ustedes han sumergido a España, EE.UU. e Inglaterra en un miedo sin precedentes conocidos hasta el momento. Su triunvirato nos ha traído por la calle de la amargura. Y el señor Zapatero y su Majestad han hecho un flaco favor a la nación entera, por intentar callar una verdad como un templo, es decir criticar la mala gestión gubernamental de Aznar. El señor Aznar merece todos los insultos y descalificativos posibles por su mala gestión gubernamental. Es más voy aún más lejos, no se que puñetas pinta el Rey como jefe del Estado. ¿Donde estaba su Majestad cuando España gritaba entera que no quería participar en esa loca guerra del señor Bush?. Si hubiera estado en mi mano, y como jefe del estado, pego un golpe de Estado de muy padre y señor mío, destituyo al jefe del ejecutivo y convoco elecciones generales para un nuevo jefe del ejecutivo. Eso es para mi un jefe de Estado. ¿Para que puñetas quiere España un jefe del Estado que ni pincha, ni corta.?, o se es un jefe de estado con plenos poderes o no se es. Y si a esto alguna gente lo interpreta o lo llama dictadura, pues entonces lo siento por ellos. Pero déjenme que pregunte lo siguiente ¿qué puede hacer el pueblo español, o en su caso el jefe del estado, cuando se tiene a un jefe del ejecutivo que no sabe gobernar?, ¿cómo se destituye?, ¿o acaso no se puede destituir a un jefe de gobierno? ¿y quien puede destituirlo?. Es decir, que si no se puede destituir, ¿tenemos que aguantarnos con este individuo inepto hasta que se convoquen elecciones generales y soportar su inepto gobierno?, pues mire usted que gracia. Entonces vaya una democracia que tenemos desde luego.

Aplaudo al señor Chávez y ole sus cojones. Así se hace Chávez. Dejemosno de diplomacias, sonrisitas y amiguismos. Digamos las verdades por su nombre y con rabia.

No me toquen las pelotas, que cuando se me dispara la ira, me convierto en un tirano en potencia.

lunes, 5 de noviembre de 2007

Aires Nuevos


Hace tiempo que no pongo nada en mi blog. Por unas cosas o por otras al final es algo que voy posponiendo para otro día y ese día nunca termina de llegar.

Dentro de unos días regreso al pueblo, para ser más exacto, regreso el día 5, después de haber estado durante un buen tiempo en Zaragoza. Aunque al final no se para que vine a Zaragoza, quizás sólo vine para perder el tiempo, o quizás para perder de vista a algunas personas que no soy de su agrado y así evitar situaciones de conflicto, o de roce.

Me dicen que no personalice mi blog, que me dedique a hablar más de cosas en general, a opinar o comentar asuntos del día al día y no hable de cosas personales porque al fin y al cabo lo personal no interesa a nadie. Pero yo digo que hay que poner de todo en un blog, bien sean cosas que se van aconteciendo diariamente en la sociedad, como cosas personales. Y hablando de cosas personales, no puedo dejar de plasmar en este blog ciertos acontecimientos que pasaran en breve y que cambiaran mi vida como también la marcaran para siempre. Dichos acontecimientos los omito, pero para no pecar de imprudente o de soberbio. Yo desde luego, los huelo, como se huele el aire a hierba reciente cortada, o el aire a tierra mojada tras una lluvia. No voy a negar que siento algo de miedo a lo que tenga que venir, pero espero que sea bueno por el bien de todos. Desde luego los aires que corren actualmente no son buenos en absoluto, han de correr aires nuevos para el beneficio de todos ya que de lo contrario acabaríamos perjudicándonos y sin darnos cuenta que es lo peor. ¿Pero de que aires estoy hablando, qué aires nuevos tienen que correr, qué aires están viciados?., de cosas mías personales es de lo que estoy hablando, de la gente que me rodea y con la cual convivo diariamente como también trabajo con ella, de la labor que desempeño actualmente, de problemas que surgen en el día a día, de la convivencia, de la familia, de mis amigos, de mis preocupaciones, de mis deseos, etc, etc, etc. ¿Y a quien le interesa leer esto?, pues sólo a mi, que para eso soy yo quien lo redacto y lo plasmo en estas líneas para el recuerdo, ni más ni menos, y poco me importa que esto no cause ningún interés.

En resumidas cuentas y centrándome en lo que me interesa digo, que lo que tenga que venir que venga pronto y que sea para bien no sólo mío sino de todos.

Aporto una pequeña pista de lo que va a suceder. Alguien recibirá las sagradas ordenes en breve y una vez que esto ocurra habrá cambios que nos afectaran a todos en general. No digo más. Pueden ser cambios buenos o cambios malos, pero eso es algo que ya se vera en su momento. Para mi, ojala que todo cambie llegado el momento oportuno, como también deseo que todo lo construido hasta el momento se deshaga y que cada uno se vaya con Dios por el camino por el cual vino. Deseo esto porque en estos momentos, el aire que se respira esta viciado, es un aire malsano, se respira un aire de tensión y esto no es bueno para ninguno de nosotros. Mucha sonrisa, mucha diplomacia, pero verdaderamente no nos soportamos los unos a los otros, y así llevamos años. No somos verdaderamente una comunidad... y para ser sólo al fin y al cabo una comunidad de personas, o una comunidad de individuos que es lo que somos esencialmente, mejor deshacerlo todo y que cada cual se aguante su propia vela. No voy a entrar ahora a mirar quien tiene la culpa ya que es evidente que la culpa es de todos, incluido yo. Como tampoco voy a mirar que es lo que ha pasado para que esto se haya vuelto insostenible, ya no es el momento. Cosas pasadas son cosas juzgadas, como también es cierto que lo que mal empieza mal acaba. Sólo queda aprender de los errores cometidos, no volverlos a cometer y mirar hacia el futuro, ni más ni menos. Y termino diciendo una frase bastante conocida y que a mi me gusta decir de vez en cuando, “Sancho, con la iglesia hemos topado”.

viernes, 14 de septiembre de 2007

Nuevo Superior General


Es un gozo anunciar que los Padres Carmelitas Calzados, desde el día 13 de Septiembre tiene un nuevo Superior General. Y además español.

Su nombre es Fernando Millan y era hasta ahora Provincial de la Región Bética.

Releva en el puesto al P. Joseph Chalmers que durante doce años ha sabido llevar con gran humildad, confianza y alegria en el Señor, las riendas de la Orden.

miércoles, 12 de septiembre de 2007

España sin curas, frailes y monjas.


Preguntaba Benedicto XVI, hace unos días ¿qué sería del mundo si no hubiera curas, frailes y monjas?. A lo que yo pregunto ¿para qué?.

Si no hubiera curas ni frailes ni monjas, no pasaría absolutamente nada, pues el testimonio de estas personas es muy deficiente en un porcentaje bastante alto. Sus palabras, no van acompañadas de gestos. Como decía un conocido mío, muchas de estas personas conviven sin quererse, comparten sin amarse y mueren sin llorarse. Que gran verdad, desde luego.

Hoy en día la Iglesia tiene una gran escasez de vocaciones en todos los niveles. El mensaje de Cristo ya esta muy usado, muy escuchado y como la Iglesia no innove como seguir predicando la palabra de Dios sin que suene a repetitivo, me parece que se va a quedar sin curas, sin frailes y sin monjas al paso que va. Es más, si juntamos que por un lado el mensaje de Cristo que ya es muy desgastado, muy usado y por otro los antitestimonios de ciertos curas, frailes y monjas, pues como que no avanzamos.

El testimonio que puede dar un cura, un fraile y una monja no es muy distinto del testimonio que cualquier familia puede dar, o incluso de cualquier cristiano comprometido por los más desfavorecidos.

¿Por qué hoy en día las ONG tienen cada vez más gente y las ordenes religiosas y los seminarios tienen menos vocaciones?. Es muy fácil, porque en una ONG el compromiso que adquieres es para un determinado tiempo mientras que en una orden religiosa o en la vida sacerdotal, el compromiso es para toda la vida. Esta es la diferencia.

Hay tan pocos frailes, curas y monjas que brillen con luz propia, que son tan escasos como los diamantes. El 90% de ellos lo que hacen es dar un antitestimonio y encima ahuyentan a las futuras vocaciones.

Para ser un buen cristiano, no hace falta ser ni cura, ni monja, ni fraile.

Es tan grande la escasez de vocaciones que muchos conventos y muchos seminarios se ven obligados a importar vocaciones de países pobres, como Sudamérica o África.

domingo, 9 de septiembre de 2007

Noche Oscura


Llevo varios días cansado, o más que cansado estoy en plan apático. No tengo ninguna motivación, paso de todo prácticamente, etc., vamos, que no estoy para tirar cohetes. La relación con mis compañeros no es muy buena, es correcta, educada, pero no hay compenetración, no hay química, no hay empatia. Bien es cierto que nunca fue buena la relación. Luego por otro lado el ambiente que me rodea no es el más idóneo que digamos, etc. Y si a esto le sumo que presto más atención a los defectos de las personas que me rodean, que a sus virtudes, pues como que ya se puede uno morir. No veo unión entre nosotros, veo más, división, como si fuéramos cada uno de nosotros una isla. Y ninguno de nosotros ponemos nuestro esfuerzo para unirnos, pasamos de hacer cualquier intento de formar una comunidad que es lo que somos al fin y al cabo. Pienso que este barco hace aguas por todos los lados. Se mire por donde se mire no hay adonde agarrarse. Decía mi padre que para que un carro avance todos tienen que empujarlo, pero el problema esta en que sólo el capitán empuja el carro y no quiere que nadie más lo empuje. Un problema de los muchos que esta comunidad tiene.

Me es muy difícil explicar con palabras la situación tan mala por la que estoy pasando en estos días. Lo que se, es que al hacer memoria de situaciones malas que me han pasado y uno esto a los defectos que veo en las personas que me rodean, pues como que me desmotivan y hacen que me vuelva indiferente y pasivo para todo. Me he convertido en una isla. Ojo, no sólo yo eh, también mis compañeros se ha vuelto islas por lo que observo. El tiempo, el trabajo, el roce diario, los defectos de los demás, en definitiva un cúmulo de cosas que hacen que nos aislemos de todos los que nos rodean diariamente. Y como he dicho, no sólo yo. Convivimos de mala gana, trabajamos porque tenemos que hacerlo forzosamente y la alegría entre nosotros brilla por su ausencia. ¿Será esto el principio del fin?. Sólo el tiempo lo dirá.

Puede ser que yo tenga una visión bastante pesimista de todo esto, pero de lo que no me cabe la menor duda es que las relaciones interpersonales entre nosotros, brillan por su ausencia. ¿pero por qué?, porque todos nosotros prestamos más atención a los defectos del que tenemos al lado que a sus virtudes y esto hace que nos aislemos los unos de los otros. Si nos fijáramos más en nuestras virtudes que en los defectos otro gallo cantaría. Pero claro, las asperezas pesan mucho, y condicionan mucho las relaciones entre nosotros. Desde luego la convivencia en una comunidad es verdaderamente la piedra angular.

En definitiva como digo yo, ya veremos por donde salta la rana a este paso.

Yo quisiera que todos incluido yo, hiciéramos un examen de conciencia y nos fijáramos cuales son nuestros defectos e hiciéramos un propósito de intentar, que menos, pulir esos defectos, pero claro, como dice el refrán: “Condición y figura hasta la sepultura”, no hay cambio, no se quiere cambiar. Y no hablo de defectos pequeños, pues son muy gordos, hablo de envidia, de odio, de un egoísmo en grado supremo, de intolerancia, de demagogia nociva, etc. Y lo que más me cabrea es que cuando reflejas el defecto de esa persona, te suelta un “esos son cosas tuyas”. Si, si, ojala fueran cosas mías. Estos defectos son los que están afectando en nuestras relaciones comunitarias y ninguno hacemos nada por pulir nuestros defectos. Y encima no soportamos que nos digan cuales son nuestros defectos. En esto sin embargo, yo tengo la humildad de reconocer que verdaderamente tengo defectos y los enumero uno por uno. Pero hay otros que su grado de soberbia es tan grande que les impiden ver su defecto y enciman le sienta mal que se lo digas.

Una comunidad así jamás podrá ir a buen puerto, nunca.

viernes, 24 de agosto de 2007

Diplomacia eclesiastica


Desde el mes de Julio tenemos en casa a un chico de Eslovaquia que nosotros llamamos Miro. Es un conocido de mi compañero Jorge. Digo bien, conocido, pues no hay una amistad labrada entre ambos.

Hay ciertas cosas de Miro, que no son del agrado de Jorge, y en vez de decirle lo que no le gusta, se calla por no estropear la relación digamos. A esto yo le llamo diplomacia...., si fuera yo ya le habría dicho cuatro cosas bien dichas. Pero Jorge, es mucho Jorge.
¿Qué tiene esta relación de especial?, simplemente que es de resaltar por un lado el exceso de diplomacia por parte de mi compañero y por otro lado la falta de sentido común de Miro. El uno se pasa tres pueblos y el otro se queda corto. Eso si, si fuera yo el que cometiera los errores, Jorge no dudaría en darme un toque de atención. En definitiva yo soy yo, y Miro es Miro. Conmigo hay confianza y con el eslovaco no la hay. Pero yo digo, que aunque no haya confianza porque no hay un roce, eso no quita de que se digan las cosas a su tiempo y en su momento. Mi compañero es de las personas que no le agrada llevarse mal con la gente como tampoco quiere cultivarse una imagen mala de si mismo y prefiere pecar por defecto que por exceso. En definitiva, cuida mucho la imagen externa que da de si mismo hacia los demás. Pero aunque se empeñe en dar una imagen buena, eso no quita de que tenga cosas de su persona que hacen que su imagen no salga muy bien parada, pues todo el mundo tenemos defectos. El problema es que él no ve, ni asimila esos defectos aunque se le diga, te responde con un “eso son cosas tuyas”, ojala fueran cosas mías, desde luego.

miércoles, 15 de agosto de 2007

Calvinismo


El calvinismo es una doctrina teológica cristiana protestante elaborada por Juan Calvino (reformador religioso francés del siglo XVI) en su libro Institución de la Religión Cristiana y desarrollada por Teodoro de Beza.
El calvinismo niega que la ordenación sacerdotal sea un sacramento. Dentro de sus postulados más importantes se incluye la creencia en la soberanía absoluta de Dios y la doctrina de la justificación sólo por medio de la fe.
El calvinismo enseña la salvación por gracia, no por obras, para lo que es necesario creer o confiar en Jesús el Cristo como único y suficiente salvador.
Juan Calvino tuvo una influencia muy notoria en el desarrollo de la Reforma Protestante. A los 25 años, en 1534, empezó la primera edición de su obra Institución de la Religión Cristiana, que se publicó en 1536. Esta obra, que fue revisada en diversas ocasiones durante su vida, además de la numerosa colección de cartas pastorales y comentarios bíblicos, constituye la fuente de la repercusión que ha tenido sobre todas las denominaciones del Protestantismo a lo largo de su historia.
El crecimiento de las iglesias reformadas y calvinistas pertenece a la segunda fase de la Reforma Protestante. Tras la excomunión de Martín Lutero por la Iglesia Católica Romana, Calvino se refugió en Suiza. Había firmado la confesión luterana de Augsburgo en 1540 pero su repercusión fue más notable en la Reforma Suiza, la cual no era luterana, sino que se basaba en las enseñanzas de Ulrico Zwinglio. La enseñanza y la doctrina protestante estaban evolucionando de manera independiente a Martín Lutero, bajo la influencia de muchos escritores y reformadores, destacando la preeminencia de Calvino.
Aunque el calvinismo puede referirse principalmente a la doctrina de las iglesias calvinistas, incidió de manera sustancial en el fundamento de la doctrina protestante e influyó en numerosos teólogos no relacionados con la iglesia calvinista per se, como Francisco Gomarus, el fundador de la iglesia presbiteriana, John Bunyan, un teólogo bautista, y el teólogo norteamericano Jonathan Edwards, que protagonizó el resurgimiento espiritual denominado Primer Gran Despertar en los Estados Unidos.

DOCTRINA CALVINISTA

La Gracia Soberana

El calvinismo enfatiza la depravación total de la naturaleza moral humana hacia la necesidad de la gracia soberana de Dios en la salvación. La Biblia (Romanos 3:10-12) enseña que las personas son completamente incapaces de seguir a Dios o escapar de la condenación delante de Él y que solamente por intervención divina drástica, en la cual Dios cambiando la naturaleza misma del creyente (nuevo nacimiento) quitando el corazón de piedra y poniendo uno de carne, pueden las personas ser convertidas de rebelión a obediencia voluntaria.
Desde este punto de vista, todas las personas dependen enteramente en la misericordia de Dios, a quien le sería justo el condenarlos a todos por sus pecados, mas ha escogido ser misericordioso con muchos para dar gloria a su propio nombre. Una persona es salvada mientras que otra es condenada, no por causa de la voluntad, fe, o alguna otra virtud en la persona, sino por causa de la elección soberana de Dios para tener misericordia de él. Aunque la persona debe actuar para creer y ser salvo, esta obediencia de fe es el regalo de Dios según el calvinismo y por esto Dios completa la salvación de pecadores.
Los calvinistas enseñan estas Doctrinas de la Gracia primeramente porque son bíblicas; luego estas doctrinas demuestran la magnitud del amor de Dios al salvar a aquellos que no querían ni podían seguirle, así como para quebrantar la arrogancia y la dependencia en sí mismo y caer en los tiernos brazos del verdadero y Soberano Señor. La santificación se persigue como el confiar continuo en Dios para limpiar el corazón depravado del cristiano del poder del pecado cancelado y extender el gozo cristiano.

"La Vida es Religión"

El sistema teológico y las teorías prácticas de la iglesia, familia y vida política, todas (ambiguamente) llamadas "calvinismo," son el crecimiento de una conciencia religiosa fundamental que está centrada en la soberanía de Dios. En principio, la doctrina de Dios tiene un lugar preeminente en cada categoría teológica, incluyendo el entendimiento calvinista de cómo una persona debe vivir. El calvinismo presupone que la bondad y el poder de Dios tienen un libre e ilimitado alcance de actividad, y eso trabaja como una convicción de que Dios está obrando en todos los aspectos de existencia, incluyendo los aspectos espirituales, físicos e intelectuales, ya sea secular o sagrado, público o privado, en la tierra o en el cielo.
Según este punto de vista, el plan de Dios se trabaja en cada evento. Dios es visto como el creador, preservador, y gobernador de todo. Esto produce una actitud de dependencia absoluta en Dios, la cual no se identifica solamente con actos temporales de piedad (por ejemplo, la oración); si no que es un amplio patrón de vida que, en principio, aplica tanto a cada obra trivial como a tomar la comunión. Para el cristiano calvinista, toda la vida es religión cristiana. Al calvinismo también se le atribuye una doctrina basada en la radicalización del luteranismo, impuesto en el S.XVI.

Los Cinco Puntos del Calvinismo

La teología Calvinista es identificada en la mente popular como los "cinco puntos del calvinismo," que son un resumen de los juicios (o cánones) presentados por el Sínodo de Dort y que fueron publicadas como una respuesta detallada (punto por punto) a los cinco puntos de la Protesta Arminiana. Calvino mismo nunca usó tal modelo, y nunca combatió el Arminianismo directamente. Estos puntos, pues, funcionan como un resumen de las diferencias entre el Calvinismo y el Arminianismo, pero no como una suma completa de los escritos de Calvino o de la teología de las iglesias reformadas en general. La aserción central de estos cánones es que Dios es capaz de salvar a cada persona por quien Él tenga misericordia y que sus esfuerzos no son frustrados por la injusticia o la inhabilidad del hombre.

Los cinco puntos del calvinismo son:

1. La Depravación total (o inhabilidad total) del hombre: Como consecuencia de la Caída del hombre, cada persona que nace en este mundo está esclavizada al servicio del pecado. Según este punto, las personas, por naturaleza, no están inclinadas a amar a Dios con todo su corazón, mente o fuerza, sino que están inclinadas a servir sus propios intereses sobre aquellos de su prójimo, y rechazan el señorío de Dios. Por esto, todas las personas, por sus propias facultades, son incapaces de escoger el seguir a Dios y ser salvos.
2. Elección Incondicional: La elección de Dios desde la eternidad de aquellos a quienes Él traerá a Sí mismo no es basada en virtud prevista, mérito, o fe en dichas personas. Sino que está incondicionalmente fundada en la misericordia de Dios.
3. Expiación Limitada (o redención particular o expiación definida): La muerte de Cristo tuvo como propósito quitar la culpa de los pecados solamente de aquellos a quienes Dios escogió en su misericordia antes de la fundación del mundo y que posteriormente atraería a sí mismo. Se "limita" en quitar los pecados de los elegidos, mas no de los de la humanidad, y es "definida" y "particular" porque la expiación es segura para estas personas particulares.
4. Gracia Irresistible: La salvación de un ser humano se realiza en las tres personas de la Trinidad, el Padre Eligió a los que habrían de ser salvos, El Hijo llevó a cabo la redención y propiciación, el Espíritu Santo, llama y persevera a los santos. Esta llamada, cuando es efectuado por el Espíritu Santo, es eficaz, no puede ser resistido por la persona, que necesariamente llegará a la Fe en la obra Salvadora de Jesus.
5. Perseveración de los Santos: (Entiéndase Santos como aquellas personas que han adoptado la Fe en Jesucristo y por tanto son salvos) Aquella persona que ha sido llamada por el Espíritu Santo y que por ello es un verdadero creyente, nunca podrá abandonar la Fe. Esta doctrina es un resultado de la inmutabilidad del caracter de Dios y de su Omnipotencia, que al proponerse desde antes de la fundación del mundo tener misericordia para con una persona, El realizará su propósito sin falla. Por lo tanto un verdadero creyente no puede caer de la gracia, no puede perder la salvación.

Movimientos cristianos relacionados con el calvinismo

Los siguientes movimientos o grupos están relacionados en doctrina o historia con el calvinismo:
· La Iglesia Presbiteriana
· El Puritanismo
· Los Hugonotes
· La Iglesia Reformada
· Iglesias Congregacionales
· La Iglesia Bautista Reformada

Teocracia


Una teocracia (del griego Teos τεοσ[Dios] y Cracia χρατοσ[Gobierno]) es una forma de gobierno en la que los líderes gubernamentales coinciden con los líderes de la religión dominante, y las políticas gubernamentales son idénticas o están muy influidas por los principios de la religión dominante; normalmente el gobierno afirma gobernar en nombre de Dios o de una fuerza superior, tal como especifica la religión local.

Tipos

El sistema teocrático más antiguo conocido está contenido en los libros de Moisés que contienen las Leyes dictadas por Jehová. Existen otros tipos de teocracias o seudoteocrácias. Un ejemplo es el cesaropapismo, en que el poder es compartido entre un líder secular (un emperador, un César) y un líder religioso (un papa). La teocracia también puede ser ejercida directamente por el clero (como ocurre en Irán) o indirectamente (como a través del derecho divino de los reyes).
Esta forma de gobierno fue apoyada por el reformista Juan Calvino.
Entre las teocracias actuales se encuentran Arabia Saudita, Irán y el Vaticano.

lunes, 13 de agosto de 2007

Pseudoamistades peligrosas


Hace tiempo, escribí un articulo que titulaba “Amistades Peligrosas”. En dicho articulo relate la relación que tenía hasta ese momento con Carlos y lo que había sucedido hasta el momento en esta amistad que yo mantenía.

¿Qué ha sucedido para que esta relación entre Carlos y yo, se haya retomado donde se quedo?, la respuesta, no la se, evidentemente. Habrán confluido varios factores, pero los desconozco al día de hoy.

Si que es cierto que en su momento y con bastante diplomacia le comente a Carlos, lo que a mí me molestaba de su persona, y es la lengua. Tiende a ser simpático delante de la gente, pero luego por detrás les pega la puñalada trapera. Esta forma de ser, le ha traído que al día de hoy, no tenga prácticamente amigos y este más sólo que la una. Sólo se dedica por entero a su trabajo y a su casa. Amistades, no tiene ninguna, quizás conocidos, pero nada más. No tiene vida social.

Cuando yo le comente con tacto su defecto, él lo asimilo bien. Pensé que se lo tomaría a la tremenda, pero no fue así. En ese momento se produjo lo que yo llamaría una especie de confesión entre él y yo. Nos fuimos diciendo defectos que veíamos el uno en el otro. Al final se produjo una empatía entre los dos. Dicha empatía se mantiene al día de hoy y la relación sigue adelante. Pese a que tiene el defecto de criticar a la gente, cuando dan la medía vuelta. A mí incluido, por supuesto. Ahora ya no tanto como en el pasado, pero sigue todavía si tiene oportunidad.

De vez en cuando se pone en plan socarrón, o sarcástico, cosa que no me hace gracia, pero al fin y al cabo, lo tengo asimilado más o menos. Hay comentarios que me hieren más y otros que me hacen menos daño, o que los sobrellevo mejor. No me gustan las personas sarcásticas. Y aunque es algo que intento sobrellevar lo mejor posible, hay comentarios y comentarios.

Habrá gente que se pregunte ¿qué cómo es posible que yo siga manteniendo esta relación con este señor, pese a que me critique cuando puede?, incluso puede haber alguien que piense que yo soy igual que este señor al continuar con esta relación. La respuesta es fácil y muy deducible. Él, me compra el tabaco, o me da dinero desinteresadamente cuando quiere, para que me lo compre. Es una relación de interés, por mi parte. No es una relación de pura amistad básicamente. Lo que me ata a él, es su generosidad en cuanto al tabaco se refiere. Ya que los dos compartimos el mismo vicio al día de hoy. Para mí, estupendo, pues he encontrado un autentico filón de oro, y más viendo yo que mi economía es muy frágil y no me permite poder mantener el vicio del tabaco. Pero corro el riesgo de que en esta relación pase lo que dice el refrán: “Lo poco agrada y lo mucho cansa”. Entonces cuando se canse, ya veremos en que queda la relación. ¿Si sigue adelante o por el contrario se rompa al no a ver nada de provecho para mí?. Si se rompe por mi parte, mal asunto, porque eso demostraría que las relaciones interpersonales que tengo son basadas en un interés puro y duro. Tampoco es esto, desde luego y no es la imagen que quiero dar, ya que no es así, ni es verdad. La relación que yo pueda mantener con la gente no la baso en el interés que pueda sacar de provecho para mi. Son relaciones desinteresadas totalmente. Ni tampoco podemos generalizar o extrapolarlo a otras amistades, pues sería una equivocación quien piense así. Esta relación de interés sólo ocurre con Carlos, con nadie más.

He aquí el porque esta relación con él continua todavía al día de hoy. Esto es como diría mi padre, “Dame pan y dime tonto”, pues lo mismo.

¿Y a qué se debe de que este hombre me de a mí tabaco o en su defecto dinero desinteresadamente para comprármelo?, sencillamente porque él conoce mi adicción a dicho vicio, como también sabe que mi economía es frágil y no puedo costeármelo. En definitiva, siente cierta lastima o compasión. Para mí desde luego, estupendo. ¿Pero hasta cuando?, esto es lo que no se. Puede que ocurra mañana, dentro de una semana, de un mes, de un año, no se sabe.

miércoles, 8 de agosto de 2007

Magallón


Hace tiempo que no escribo en mi blog y creo que ya va siendo hora de poner aunque sean dos líneas. Bien es cierto que por una cosa o por otra al final apenas le he dedicado tiempo.

Mucho a llovido desde la ultima vez que escribe. He estado de vacaciones desde mediados de Junio hasta el 13 de Julio en Madrid. Han sido muy buenas. Espero que el año que viene pueda volver. Luego, el día 16 de Julio tuvimos la profesión religiosa de Jorge. En ese mismo día se cumplían 7 años de la mía. Después, tuvimos una pequeña merienda en nuestra casa y hubo mucha asistencia de gente, tanto por voluntarios de la casa como por familiares del hermano Jorge.

Asimismo también debo decir que después de volver de mis vacaciones me encontré alguna que otra sorpresa desagradable.

Por otro lado, después de volver de Madrid, nuestro Superior nos reunió a todos para asentar las comunidades, coincidiendo con la profesión de Jorge. Pues ya sabíamos todos que después de que él hubiera profesado habría cambios en las comunidades.

En la reunión se determino que en la casa de Zaragoza se quedara Jorge y Vicente. Más en la comunidad de Magallón se queda Paco y un servidor. Cuando me entere que a mí me mandaban a Magallón, no me hizo ni una pizca de gracia. Pues siempre me ha tirado más la ciudad que el pueblo. Pero bueno, todo es cuestión de adaptarse. Los primeros días de mi estancia en Magallón se me hizo muy cuesta arriba. Al cabo de una semana ya empecé a habituarme al entorno y al final he acabado pillándole el gusto este pueblo del Campo de Borja.

Es un pueblo de unos 1.300 hab., rico en uva y en aceite. Pero es principalmente un pueblo vitivinícola. La gente vive principalmente de la agricultura. Esta muy bien comunicado con Zaragoza, se tarda una mediahora por carretera. Es un pueblo bastante rico en historia.

Sinceramente me ha acabado gustando Magallón, aunque eso no quita de que me escape todos los meses por la ciudad.

En estos días me encuentro por Zaragoza pues estoy sustituyendo a la auxiliar que tenemos contratada, así que volveré al pueblo para primeros de Septiembre. Mientras tanto a disfrutar de la ciudad que es lo que me gusta

domingo, 10 de junio de 2007

¿Qué es Koinonía?

Koinonía es un concepto teológico que alude a la comunión eclesial y a los vínculos que ésta misma genera entre los miembros de la Iglesia y Dios, revelado en Jesucristo y actuante en la historia por medio del Espíritu Santo.

La noción de Koinonía en el Primer Milenio

En el Nuevo Testamento (NT) y en los Santos Padres, la noción de koinonía o communio ha asumido tres sentidos, estrechamente relacionados:
· La koinonía, en sentido cristológico/pneumatológico, presente en el NT y desarrollado sobre todo por los Padres griegos, se lo expresará con el vocabulario de «divinización y santificación».
· El sentido eucaristía, ya testimoniado en el s.II, conserva un amplio respiro en el vocabulario griego y también en San Agustín, pero luego, en el vocabulario latino, gradualmente se irá restringiendo hasta significar la recepción de la comunión.
· El sentido eclesial, presente en el NT, es el que se impone en el primer milenio tanto en Oriente
(indicado con «koinonía» o por sus sinónimos: "eiréne", "symphonía", "homopsychía", "homónoia"...) como en Occidente (indicado con «communio» y por sus sinónimos: "pax", "unanimitas", "concordia", "unitas"...). Este sentido ha sido elaborado sobre todo por los Padres latinos. (Cipriano, Agustín).

Teología de la «koinonía»

· Indisoluble relación entre koinonía y theosis. La Iglesia es esencialmente una koinonía con la Trinidad y en la Trinidad.
· Centralidad de la Eucaristía. Es la Eucaristía la primera y última forma en la cual el Espíritu realiza la unidad entre el "uno" y los "muchos".
· Simultaneidad del obrar de Cristo y del Espíritu Santo en la Iglesia. La Iglesia nace del evento cristológico-pneumatológico en su integridad. Es en el Espíritu que es posible la unidad entre el "Uno" (Cristo) y los "Muchos" (Iglesia). Del uno que es al mismo tiempo muchos. Esta visión permite explicar adecuadamente:
o la simultaneidad entre lo local y universal
o la compenetración entre esjaton e historia
o la unidad entre institución y carisma.
· Dialéctica entre visible/invisible. Los elementos visibles de la koinonía son "iconos" por naturaleza. Son "sacramentos", en el sentido que lo visible hace presente a lo invisible, el "ya", al "no todavía". Entre estos dos niveles existe un "salto", una diferencia, como la existente entre el hombre interior y exterior. Es este salto, el que justifica la continua reforma de las instituciones y la posibilidad de realizaciones históricas diversas.

Práxis de la «koinonía»

La dinámica fundamental de la práxis de koinonía está constituida por la simultaneidad entre el "uno" y los "muchos", que se expresa de modos bien precisos a nivel local y universal.
· A nivel de la Iglesia Local, el "uno" está representado por el obispo, mientras los "muchos" están representados por los otros ministros y por la comunidad entera. En el 1º milenio es clarísima la conciencia que el uno no puede existir sin los muchos y viceversa.
· A nivel de la Iglesia Universal, intraeclesialmente, la estructura que obra la koinonía universal es el Colegio de los obispos. En este sentido, podemos ver realizada la dinámica "uno-muchos" a dos niveles:
o en el converger del colegio (sinodalidad)
o en la búsqueda de centros de unidad.

La noción de Koinonía en el Segundo Milenio

La ruptura del 1054

Como fecha simbólica de separación entre el 1º y el 2º milenio podemos citar el 16 de julio de 1054, día en el cual el cardenal Humberto de Silva-Cándida, depuso sobre el altar de Santa Sofía en Constantinopla la excomunión contra el patriarca Miguel Cerulario. El 1054 es más que un símbolo: es la ratificación que signa el alejamiento definitivo entre Oriente y Occidente, ratificación que fue mutuamete levantada por ambas Iglesias.
Las primeras incomprensiones comienzan ya con la repartición del Imperio Romano de Oriente y de Occidente y la consiguiente elevación de Constantinopla al rango de Capital. Por este hecho, el obispo de Constantinopla comenzó a revindicar para sí un rango especial, rango que le sería reconocido en los Concilios de Constantinopla y de Calcedonia y que sería consagrado desde el siglo VI en adelante con el título de «patriarca ecuménico». Esto fue motivo de conflicto con los papas romanos, que veían de este modo asechado su rol primacial. Otro motivo que aumenta el distanciamiento entre Oriente y Occidente fue la unión entre el papado y el reino de los francos, unión esta que en la óptica de la sinfonía entre Iglesia e Imperio, constituía una elección inaceptable, una verdadera traición. Este es el terreno que preparó la excomunión del 1054.

Las Iglesias Orientales

Inicialmente, el apelativo de Iglesias orientales estaba restringido a las Iglesias de la Mesopotamia y de Arabia (dentro y fuera del Imperio romano). Luego, después de la constitución por parte de Dioclesiano de la diócesis de Oriente, en el 286, se hizo común llamar Iglesias orientales a todas las Iglesias de las provincias civiles que pasaron a forma parte de aquella diócesis; comprendiendo entonces, además de la Mesopotamia y Arabia, también Palestina, Fenicia, Siria, Cilicia, Chipre. En el siglo IV, el apelativo se extiende a todas las Iglesias no sólo de la diócesis de Oriente, sino también las de la "prefectura orientalis", que comprendía también Egipto, el Asia Menor, el Ponto y la Tracia (en total 5 diócesis). Después del s. VII, posteriormente a la forzada anexión de la Iliria oriental al patriarcado de Constantinopla, decidida por Justiniano en el 535, también las Iglesias de la diócesis de Macedonia (4) y de la Acadia fueron consideradas Iglesias orientales. Desde el siglo IX, con la conversión de los Búlgaros y de los otros pueblos eslavos al cristianismo, todas las Iglesias fundadas por los misioneros bizantinos pasaron a formar parte del grupo de las Iglesias Orientales.
Actualmente, el apelativo de Iglesias Orientales ha perdido ya en gran parte su significado geográfico y se ha extendido a todas las Iglesias que, encontrándose en territorio occidental, se siguen refiriendo al rito y a las tradiciones de una u otra de las Iglesias orientales cuyas sedes principales surgían un día dentro de (y más allá de) los confines del antiguo Imperio romano de Oriente.
Entre la Iglesias orientales se distinguen diversas agrupaciones, con ritos y tradiciones propias (bizantino, copto, antiocheno, armenio, caldeo).
La tradición que ha tenido una irradicación mayor ha sido la bizantina, que se difundió en el 2º milenio en todo el mundo eslavo. Ésta será particularmente objeto de nuestro estudio. Ella se define "ortodoxa" por antonomasia.
Históricamente, el nombre de ortodoxa era dado a aquellas Iglesias que, en el siglo V, durante la contorversia cristológica sobre la doble naturaleza de Cristo, conservaron la recta fe establecida en el concilio de Calcedonia del 451 y no cayeron en las herejías monofisismo o Nestorio.
Y puesto que, en Oriente las únicas que permanecieron fieles a aquella doctrina han sido casi exclusivamente las Iglesias de rito bizantino dependientes del patriarcado de Constantinopla, poco a poco el apelativo de ortodoxas fue referido a las Iglesias bizantinas.
Más tarde, luego del desprendimiento de la Iglesia bizantina de la Iglesia romana, el apelativo de ortodoxas queda casi exclusivamente para las Iglesias bizantinas no en comunión con Roma, y de nombre común pasa a ser nombre propio de aquellas Iglesias.
Hoy, se ha hecho corriente llamar a las Iglesias orientales calcedonenses Iglesias ortodozas bizantinas, y a las no calcedonenses Iglesias ortodoxas orientales.

Breve panorámica del desarrollo teológico bizantino y eslavo

El filón bizantino

La teología griega es teología de la tradición. En Bizancio los Padres permanecieron siempre vivos; a ellos se hacía referencia en todas las cuestiones teológicas. También en el 2º milenio.
Bizancio no conoció una escolástica en sentido occidental, y si bien le llegaron algunas ideas del Renacimiento humanístico, éstas no conquistaron más que algunos filósofos aislados, sin poder incidir nunca en profundidad en la teología de la Iglesia, que permaneció genuinamente patrística.
Después de la época patrística (siglo VIII), el único evento teológico importante para la ortodoxia lo constituyó la doctrina de Gregorio Palamas (1296-1359) sobre la "Energías divinas". Pero aún él, no hizo otra cosa que elaborar determinados elementos del pensamiento patrístico (en particular de Gregorio Niceno). Sobre la huella de Palamas, se deben recordar Nilo Cabasilas, Juan Cantacuceno, animador de un círculo palamita, y Nicolás Cabasilas (circa 1320-1390), eminente teólogo laico.
En los siglos sucesivos el Oriente cristiano fue golpeado por convulsiones muy graves, que hicieron que su vida espiritual fuese decayendo casi completamente. En 1453, Constantinopla fue conquistada por los Turcos. Desde entonces, la cultura greco-ortodoxa fue obligada a vivir completamente retirada a la sombra y la Iglesia, absorbida por los problemas de sobrevivencia, no tuvo la fuerza para desarrollar una reflexión creativa hasta la emancipación de los países ortodoxos de los Balcanes y, en 1821, también la de Grecia. Bizancio ya no resurgiría más como ciudad greco-cristiana.
Después de la liberación del dominio turco, Grecia no poseía todavía un sistema teológico propio, sobre el cual fundar su propia enseñanza. Por lo que en, un primer momento, fueron traducidos al griego los compendios escolásticos de la dogmática adoptada en Rusia. Después, para especializarse en teología, se comenzó a ir al exterior, especialmente a las facultades protestantes de las Universidades alemanas. De modo tal que, se formaron dos orientaciones teológicas diametralmente opuestas entre sí: la de los «consevadores» (anclados a los textos traducidos del ruso) y la de los «liberales», que llevaban consigo los influjos de Occidente.

El filón eslavo

Los principados rusos en el siglo X habían abrazado la fe ortodoxa, en el siglo XIII fueron conquistados por los Mongolia de la «Horda Dorada», acaudillados por Gengis Khan; permaneciendo bajo el dominio tártaro por casi trescientos años. Cuando a finales del s. XV, Rusia se liberó de los tártaros, el factor unificante fue la ortodoxia.
En la primera mitad del siglo XVII, nace en Rusia la primera escuela teológica de Kiev, por mérito sobre todo del enérgico metropolita Pedro Moghila (1596-1646). En ella se adoptó el método escolástico empleado en las universidades católicas. El proceso de occidentalización se reforzó con Pedro el Grande, quien institucionalizó la formación de los futuros sacerdotes según el modelo occidental (con los manuales escolásticos usados en occidente y con el latín como materia de enseñanza).
En la segunda mitad del siglo XVII, tomó ventaja el influjo protestante y así la enseñanza fue impartida en los seminarios sobre la base de los manuales escolásticos protestantes.
Al inicio del siglo XIX, el zar Alejandro I reformó la enseñanza eclesiástica y la lengua rusa fue puesta nuevamente como lengua para la enseñanza. Lentamente se fue abriendo camino una teología propiamente rusa, gracias sobre todo al metropolita Filaret de Moscú (1782-1867), al que los teólogos rusos consideran como el teólogo más importante del primer período de la época moderna. La fuerza propulsiva de esta renovación está en el regreso a los Padres.
A partir de mediados del siglo XIX surge una gran formación de teólogos-filósofos, animado por el grupo de los eslavófilos (especialmente Khomiakov, 1804-1860), que rompen de manera consciente con el racionalismo occidental y que en la discusión con dichas ideas y planteamientos nace la renovación de la teología rusa del siglo XX.
Con la victoria del bolchevismo, la Iglesia rusa fue reducida al silencio y las academias eclesiáticas fueron cerradas (las de Moscú y Leningrado fueron reabiertas en 1949).
Un elemento decisivo para un desarrollo ulterior de la teología ortodoxa fue la emigración masiva hacia Occidente de la «intellegentsia» o los estamentos cultos, compuestos de un gran número de teólogos importantes. Surgió así, en París, un centro teológico ruso (Institut de Theologie Orthodoxe de St. Serge°Instituto de Teología Ortodoxa San Sergio), otro sugió, después de la segunda guerra mundial, en Nueva York (St. Vladimir's Seminary°Seminario San Vladimir). Entre los principales teólogos de las emigraciones podemos recordar: Nicolás Afanassieff (1893-1966); Sergei Bulgakov (1871-1945); Georges Florovski (1893-1986); Vladimir Lossky (1903-1958); Jean Meyendorff (1926)...
El desarrollo de la noción de «koinonía» va, por tanto, en paralelo con la varias etapas del desarrollo teológico. Así también para la teología de la koinonía se hablará de referencia a la tradición de los Padres (siglos XI - XVIII), de relectura de los eslavófilos (siglo XIX) y de desarrollo en clave ecuménica (siglo XX).

Teología de la Koinonía

Referencia a la Tradición de los Padres

Base común y diversa evolución de la eclesiología en Oriente y en Occidente

· La concepción común de la Iglesia cuerpo de Cristo
· La acentuación interior y mística de la Iglesia de Oriente
· Comprensión en Occidente del sentido corporativo y sociológico de la Iglesia

La Eclesiología de Comunión

La koinonía, don gratuito del Espíritu, realizado en la incorporación a Cristo, es al mismo tiempo una realidad espiritual, divina y trascendente; y una realidad social, sacramental y canónica. En este segundo nivel, la koinonía se expresa:
· en la unanimidad de la fe
· en la identidad de los sacramentos
· en la unidad de la estructura disciplinar
En el período que estamos considerando, los autores bizantinos y eslavos no tematizan el tema de la koinonía. De la práxis y de las referencias dispersas en la fuentes, podemos, sin embargo, recoger algunos puntos caracterizantes:
· Importancia de los vínculos interiores de la unidad
o La unidad es pensada más sacramentalmente que jurídicamente
o La ruptura no rompe la unidad de la Iglesia
o Se desarrolla una concepción más carismática de ciertos aspectos de la vida de la Iglesia.
· El principio imperial como principio de la suprema autoridad ecuménica
o El emperador como "Pontifex maximus".
o Los papas de Roma aceptaron esta realidad hasta el siglo VIII, pero solamente de hecho (de facto) y no de derecho (de iure)!.
o Oriente ha reforzado y codificado este principio.
· Pérdida del principio teológico del primado y utilización antirromana de la teoría de la pentarquía
o Pentarquía a fines del 1º milenio, unidad entre las 5 sedes patrircales
o Después de la ruptura: 5 sentidos de la única cabeza: Cristo.
· Teoría de la diversidad
o «adiaphora»: aplicada tanto a la disciplina, costumbres como a la doctrina para separar lo 1º de lo 2º.
o «kath'oikonomiam»: una adaptación de los medios al fin. Se definen a nivel de los vínculos interiores.

La Confrontación con Occidente

En Occidente, a diferencia de Oriente, se desarrolla la línea de la Iglesia universal, con una fuerte afirmación del primado del Romano Pontífice.
En una línea que, desde fines del siglo II, adquiere contornos precisos al tiempo de San León (s. V). Viene expresada con gran fuerza en el siglo IX (Nicolás I, Juan VIII) y en siglo XI (León IX, Nicolás II, Gregorio VII), encontrando las reacciones respectivamente de Focio y de Miguel Cerulario.
En esta línea, que nace del encuentro entre la conciencia del ministerio universal confiado a Pedro y a Pablo y del modelo imperial pagano, la universalidad no estaba considerada sólo bajo el plano cristológico, espiritual, sino también eclesiástico.
El «cuerpo» debía tener una «cabeza». El pueblo debía estar bajo un pastor visible, que tuviese la autoridad suprema de alcance universal. Desgraciadamente, la legítima afirmación de este principio no siempre supo respetar los derechos de los obispos y la consistencia de las Iglesias locales, con el resultado de perder la dinámica de la real comunión entre las Iglesias.
· «Comunión con Roma como centralización en Roma»
La Iglesia universal terminó con ser considerada como una única gran diócesis. Roma fue llamada «caput, fons et origo, fundamentum et basis, cardo» de todas las Iglesias. De la "ecclesia romana" se pasa a la "curia romana". El documento bandera de esta visión es el Dictatus Papae de Gregorio VII (1073-1085). Llegando a su vértice con la Unam Sanctam de Bonifacio VIII (1294-1303).

· Reacciones al centralismo romano

o En el medioevo surgen concepciones en torno a la "ecclesia spiritualis" (cátaros, Pedro Valdo, J. Wyclif, J. Huss; S. Bernardo de Claraval, Joaquín de Fiore...).
o Otros caen sobre las estructuras externas, nace el «conciliarismo» en contra del papalismo (Dante, Guillermo de Occam; los concilios de Constanza -1415-, Basilea -1433-, Florencia -1441-: condena la superioridad del concilio.
o Otra reacción la encontramos en la Reforma (Lutero; Zwinglio; Calvino).

Síntesis

En síntesis, la eclesiología universalista occidental ha permanecido sorda frente a los reclamos que le venían de su misma vida interior. El occidente debe enfrentar la necesidad fundamental de "re-ver" su eclesiología desde el interior de la originaria visión mistérica y comunional.
Por su parte, Oriente (conjuntamente con las Iglesias de la Reforma), deben enfrentar la necesidad fundamental de considerar realmente la Iglesia en su aspecto teándrico, valorizando especialmente la unidad visible entre las Iglesias y recuperando el significado del primado petrino.
La eclesiología oriental privilegió principalmente -es difícil decir si por elección o por necesidad- el aspecto interior y mistérico de la Iglesia y no acogió categoría jurídicas en su organización interna. En esta perspectiva, cada Iglesia local era considerada un evento que realizaba el misterio de toda la Iglesia, y la estructura sinodal el instrumento que garantizaba la comunión entre las Iglesias.
Lo que acarreó graves consecuencias a dicha concepción eclesiológica fue la tolerancia siempre mayor que la Iglesia oriental tuvo para con las reivindicaciones del emperador, que pretendía mantener la unidad exterior de la Iglesia. Este hecho llevó, por una parte, a la identificación de la Iglesia con el imperio, y por otra parte, a una excesiva acentuación de los vínculos interiores de unidad entre las Iglesias. El resultado fue la progresiva no comprensión del significado ecuménico del obispo de Roma, que se radicalizó cuando este último comenzó a "galanear" en torno al reino de los francos. El camino ecuménico debería llevar a las Iglesias orientales (ya las de la Reforma) a recuperar este importante elemento, que era patrimonio adquirido en la antigua concepción de la «koinonía». Por su parte los católicos "romanos" han de poner todo de su parte para revisar las concreciones históricas que han ido desfigurando dicho principio comunional y que, aún hoy es motivo de divergencias.

La Relectura de los Slavófilos

«Slavófilos» fue un sobrenombre, dado al comienzo del siglo XIX, a los hombres que intentaban, en Rusia, de reaccionar contra el entusiasmo por las lenguas, las modas y la civilización de la Europa occidental y de desarrollar y enriquecer la lengua y el pensamiento ruso. De lado opuesto, los partidarios de la cultura europea recibieron el sobrenombre de «occidentalistas». Entre éstos el representante más expresivo ha sido Pedro Tchaadev (1794-1856), tuvo la audacia de preguntarse qué pensaba Dios de Rusia. Entre los primeros encontramos: Ivan Kireievsky (1806-1865); Alexis Khomiakov (1804-1869) -ambos laicos-, a este último se le debe el término «sobornost», que, según él, incluye «toda la confesión de fe».

La Eclesiología de la «Sobornost»

Punto de partida


La «sobornost» es la infalibilidad de una pronunciación dogmática, la unanimidad de las conciencias individuales, obrada por el Espíritu Santo, que induce infaliblemente al pueblo de Cristo a aceptar o rechazar una doctrina propuesta como verdad a creer.

Las raíces del término"sobornost"

A partir del siglo XIV los eslavos traducen "katholikén" con «sobornuiu», indicando catolicidad, es decir, universalidad.
Khomiakov rechaza las interpretaciones tradicionales (universalidad geográfica; gobierno democrático o colegial; adhesión a una verdad definida por un concilio ecuménico) y propone la de «unanimidad libre».

Visión de conjunto de la sobornost

Iglesia «sobornaia» es «una entidad espiritual orgánica, un organismo espiritual, cuyo principio vital es la gracia divina del mutuo amor». La jerarquía, si bien necesaria, es vista sólo como servicio de guía y vigilancia. La infalibilidad pertenece a la Iglesia entera. El «concensus» del Cuerpo como lugar del testimonio del Espíritu Santo.

Valoración

Existe un acento demasiado grande sobre el aspecto interior de la catolicidad desconociendo el carisma doctrinal del espiscopado. Existe, además, el riego de subjetivismo. El acento sobre la iluminación personal (o autoprofecía) peligra de llevar a cada fiel (o grupo de fieles) a construirse una Iglesia su propia imagen y semejanza.
Mientras tanto en occidente, se cultivaba una eclesiología «ultramontana» y «organológica» explicitadas, entre otros, por los teólogos A. Antón y Joseph Ratzinger.

«Eclesiología ultramontana»

Acentuación de la jerarquía y sobre todo del rol pontificio. Sus representantes más significativos son J. De Maiestre - J. de Lamennais. Esta eclesiología se fue imponiendo a través de la "Teología romana" propugnadora de la "neoescolástica". La encontramos expresada en la encíclica Mirari Vos de Gregorio XVI (1832); en el Silabus de Pío IX (1864) y el Concilio Vaticano I (1869-1870), el que resume todos estos impulsos, pero aportando una «tercera posición» ni tan papista ni tan episcopalista.

«Eclesiología organológica»

De la Escuela de Tubinga surge J.A. Möller (Symbolik 1832) para quien la Iglesia no es principalmente una organización social jerárquica sino un «organismo viviente». La Fe es ante todo una realidad interior y mística. Para él la Iglesia es a la vez Cuerpo místico y sociedad jerárquica Alcanzando recién cierta oficialidad en la Mystici Corporis de Pío XII (1943). Y encontrando su síntesis más elaborada (aunque no sin ambigüedades) recién en el Concilio Vaticano II (1962-1965).

Desarrollos de la teología de «sobornost»

Véase también: Sergei Bulgakov y George Florovsky

La Eclesiología Eucarística

La novedad de esta eclesiología está en que la relación Iglesia-Eucaristía se elabora como una propuesta eclesiológica global. El primer exponente es Nicolás Afanasieff. Entre sus discípulos podemos recordar a J. Meyendorff y A. Schmemann. Fuera de las fonteras rusas el que retoma y en algunos puntos completa a Afanassieff, es el griego Juan Zizioulas. La misma Iglesia católica no quedó insensible al influjo de esta corriente eclesiológica. La que podemos entever claramente en el nº 26 de la Lumen Gentium.
Véase también: Nicolás Afanasieff y Juan Zizioulas

Koinonía en el Movimiento Ecuménico

Véase también: Ecumenismo

Modelos de «koinonía» madurados en las reflexiones del CEI y en los Diálogos Bilaterales

«Comunidad Conciliar»

El modelo de unidad orgánica madurado en el camino del CEI fue asumido en Nueva Delhi (1961), donde se propone un tipo de unidad que se manifiesta visiblemente en cada lugar, donde todos los cristianos participan de la misma eucaristía:
Creemos que la unidad, que es a la vez don de Dios y su voluntad para su Iglesia, se hace visible cuando, en un mismo lugar, todos los que han sido bautizados en Jesucristo y lo confiesan como Señor y Salvador son conducidos por el Espíritu Santo para formar una comunidad plenamente entregada, confesando la misma fe apostólica, predicando el mismo evangelio, partiendo el mismo pan, uniéndose en una oración común y viviendo una misma vida comunitaria, que se proyecta en el testimonio y el servicio de todos; y cuando, además, se encuentran en comunión con el conjunto de la comunidad cristiana en todos los lugares y en todos los tiempos, de suerte que el ministerio y la calidad de miembros son reconocidos por todos, que todos pueden, según lo exijan las circunstancias, actuar y hablar de común acuerdo respecto a las tareas a las que Dios llama a su pueblo" (nº 2).
La palabra «comunidad» [communauté] (koinonía) ha sido elegida porque ella define lo que es verdaderamente la Iglesia. «Comunidad» precisa que la Iglesia no es simplemente una institución o un organismo. Ella es la sociedad de los que son llamados conjuntamente por el Espíritu Santo y confiesan desde el bautismo su fe en Cristo, Señor y Salvador...Una tal «comunidad» no implica una rígida uniformidad de estructura, de organización o movimiento. Una diversidad viva es el signo de la vida comunitaria en el seno del único cuerpo, animado por el único Espíritu (nº 11).
El tema de la koinonía sigue siendo profundizado en Upsala (1968), donde se pone en primer plano el tema de la «catolicidad» (el título del documento principal es: «Espíritu Santo y catolicidad de la Iglesia»). Según el documento, la catolicidad plena, en el Espíritu, se da sólo:
· en la búsqueda de la diversidad;
· en la búsqueda de la continuidad (apostolicidad y tradición);
· en la búsqueda de la unidad entre las Iglesias;
· en la búsqueda de la unidad del género humano.
En Lovaina (1971) nace la iniciativa de comenzar un estudio sobre «Conceptos de unidad y modelos de unificación». El estudio realizado en 1972 se divide en cinco capítulos; en el 5º se dice que el objetivo común por la unificación en la actualidad pasa por la «unidad conciliar», que se la puede entender como una traducción de la realidad de K. El textos deja en el fondo latiendo la tesis de un futuro concilio «auténticamente» universal.
A 14 años de Nueva Delhi, en Nairobi (1975), se recoge la idea de la unidad visible, pero reelaborada en una categoría llamada «comunidad conciliar de Iglesias locales»:
La Iglesia única, debe concebirse como una comunidad conciliar de Iglesias locales que están verdaderamente unidas. En esa comunidad conciliar, cada Iglesia local posee, en comunión con las otras, la plenitud de la catolicidad; da testimonio de la misma fe apostólica y, por consiguiente, reconoce que las otras Iglesias pertenecen a la misma Iglesia de Cristo y está guidas por el mismo Espíritu....Son una sola Iglesia en el compromiso común de confesar el evangelio de Cristo proclamándolo y sirviendo al mundo.
En Vancouver (1983), el CEI, promulga la estrategia a seguir en el camino ecuménico de aquí en más. La Asamblea fija las etapas que deberán ser objeto de la atención y de la «conversión» de la Iglesia:
· «compartir una misma comprensión de la fe apostólica y confesar conjuntamente este mensaje en forma comprensible para sus contemporáneos» (nº 6);
· «reconocerse recíprocamente, y en forma plena y total, el bautismo, la eucaristía y el ministerio» (nº 7);
· «ponerse de acuerdo sobre el modo de tomar las decisiones y de impartir las enseñanzas magisteriales» (nº 8).
En Camberra (1991) miembros cualificados (espec. ortodoxos) ponen en evidencia la carencia y la debilidad del empeño teológico de Fe y Constitución, a la que se la había encomendado la misión de realizar desde el punto de vista teológico el programa de Vancouver. No obstante la estrategia es nuevamente confirmada.
En 1993 (3-14 de agosto) se celebró en Santiago de Compostela la V Conferencia Mundial de Fe y constitución, con el título «Hacia la Koinonía en la fe, la vida y el testimonio»

Los Diálogos Bilaterales

En el entre tiempo, el tema de la Koinonía ha sido profundizado por algunos diálogos bilaterales, entre los cuales han sido especialmente fecundos el Diálogo luterano-católico, anglicano-católico, católico-ortodoxo calcedonense.
Respecto al diálogo luterano-católico destacan dos menos dos documentos12:
El primero parece preocupado por mentener distendido y abierto todo entero el horizonte de la unidad: unidad en la Palabra, en el sacramento, y unidad en el ministerio. Se evidencian tres caracteres bien precisos de la unidad: unidad visible y no sólo interior, unidad en la diversidad, unidad dinámica.
El segundo documento tiene las dimensiones y la profundidad de un verdadero tratado teológico: En primer lugar, funda la tesis de la unidad a partir la eclesiología de comunión; A continuación, ilustra los modelos de «uniones parciales» entre las Iglesias («espiritual», «de diálogo», «de acción común», de «intercomunión») y de «uniones completas» ( algunos de estos modelos son intercambiables o de desarrollos sucesivos: «unión orgánica», «asociación coorporativa», «comunión a través de la concordia», «comunidad conciliar», «unidad en la diversidad reconciliada»); Además sugiere de recuperar y hacer un tesoro del "precedente" del Concilio de Florencia y de utilizar algunas categorías que permitan la diversidad («tipos eclesiales» e «Iglesias hermanas»; Y finalmente, en el discurso sobre las formas y fases de la unión entre las Iglesias católica y luterana, subraya con fuerza el tema del «mutuo reconocimiento» y de la «mutua recepción».
Respecto al diálogo anglicano-católico, destacan de modo particular los 5 documentos, discutidos y concordados desde 1971 al 19813.
La «Relación Final» (The final Report) de Windsor, «Introducción» a los 5 documentos elaborados precedentemente, dice que el concepto de «koinonía» constituye la clave fundamental para la comprensión del misterio de la Iglesia y por tanto de los documentos de la Comisión: en los que la eucaristía es presentada como signo eficaz de la koinonía, el episcopado como servicio de la koinonía y el primado como vínculo y centro visible de la koinonía.
Otros textos se han referido al diálogo católico-ortodoxo calcedonense calcedonense.

Estructuras de Koinonía

Las estructuras en la Iglesia antigua toman su forma según la dinámica de la simultaneidad entre el "uno" y los "muchos". Es la dinámica-base desde la cual se desarrollan las diferentes tradiciones oriental y occidental del 2º milenio.
Estructuras de Koinonía en la Iglesia Local
La unidad profunda que liga a un obispo con su comunidad es una realidad dinámica, en la cual confluyen dos movimientos:
· el movimiento que va del uno a los muchos: episcopado monárquico
· el movimiento que va desde los muchos al uno: sinodalidad

Estructuras de koinonía entre las Iglesias: el Uno

El Emperador, suprema autoridad reguladora de la «oikoumene»

Mientras que en occidente la caída del imperio permitió a la Iglesia conquistar y reforzar gradualmente su libertad, en oriente no fue posible, no obstante las protestas de Basilio, Crisóstomo, Flaviano, más trade Máximo el Confesor, Ignacio y el mismo Focio.
En oriente se desarrolló un sistema de simbiósis entre Iglesia y Estado que los históricos occidentales definieron como «cesaropapismo», pero que Meyendorff sugiere llamarlo, más correctamente, con el término «sinfonía». El codificador por excelencia del sistema "sinfónico" entre estado e Iglesia es Justiniano. Para este, el rol de la Iglesia es intervenir ante Dios en favor del Estado. El fundamento de esta concepción "sinfónica" eclesiológico-imperial es la encarnación. La unidad entre naturaleza divina y naturaleza humana en la persona de Cristo (= fe de Calcedonia) es vista como la fuente de la unidad entre lo espiritual y lo material, entre lo sagrado y lo profano, entre la jerarquía civil y la eclesiástica.
El sistema teocrático bizantino entró en crisis con la ocupación de Bizancio por parte de los turcos. Muchos se preguntaron cómo le podía suceder una cosa así a la «ciudad imperial del imperio ortodoxo, tan amada por Dios».
Rusia no pensaba lo mismo. La idea teocrática bizantina era considerada todavía válida, pero ahora en contra de la misma Bizancio. Desde dónde se sostenía:
"La primera Roma ha caído con la herejía apolinarista; la segunda Roma se ha unido a la primera en el 8º Concilio (de Florencia) y por punición de esto, los infieles han abatido con hachas las puertas de la Gran Iglesia (Santa Sofía). Pero la tercera Roma (Moscú) permanece y no habrá una cuarta".
La ideología teocrática habría sido fatal para Rusia. En el arco de poco más de 2 siglos, el estado habría puesto de rodillas a la Iglesia. En efecto, en tiempos de Pedro el Grande, el Patriarcado de Moscú fue sacado del medio y la Iglesia rusa se transformó en Iglesia estatal con una organización interna mitad jerárquica, mitad estatal, que imitaba en muchos aspectos a la Iglesia protestante.

Negación del primado del Obispo de Roma

El primado que entre los sucesores de los Apóstoles detentaba el sucesor de Pedro permanece indiscutido (aunque no precisado claramente) hasta que la sede de Pedro fue también la capital del imperio (Ver: Ignacio, Ireneo, Cipriano y la práxis eclesiástica de comunión y de apelo). Pero cuando Costantinopla fue elevada a capital del Imperio, al comienzo a la par de Roma y luego al puesto de Roma, entonces surgió la cuestión si el primado del obispo de la vieja capital aún podía continuar.
La pretensión de Constantinopla provocó en Occidente la clarificación de la teología del primado y su desarrollo en sentido petrino.

La Situación Actual

La caída del imperio, la falta de una base eclesiológica y canónica para un "papado" de oriente ha llevado a las Iglesias ortodoxas a debilitar mucho el polo unitario de su dinámica de koinonía. Una prueba es la fragmentación de la ortodoxia en muchas Iglesia "autónomas" y "autocéfalas": fenómeno que no pertenece, excepto Chipre, a la tradición antigua.
El resorte que ha hecho saltar la actual fragmentación ha sido la reaparición del "nacionalismo" (siglos XVIII-XIX), que ha llevado las varias Iglesias nacionales a considerar la autocefalía como madurez eclesiástica (así: Rusia (1448), Georgia (1811), Grecia (1833), Serbia (1879), Rumania (1885), Bulgaria (1872), Checoslovaquia (1951). Algunas como Rusia (1589), Serbia (1920), Rumania (1923), Bulgaria (1961), habrían de reconocer el propio rango patriarcal.

Estructuras de Koinonía entre las Iglesias: los Muchos

En la tradición oriental

En el 2º milenio, oriente no se separa, a excepción del concilio de Moscú de 1917-1918, de la antigua concepción de la sinodalidad. Las celebraciones de sínodos/concilios, que continúa, a pesar de las pausas y los límites que veremos en las Iglesias Oirientales del 2º milenio, testimonia la conciencia de los obispos de pertenecer y representar una realidad fundada en la unicidad e identidad del sacramento y de la palabra, y por tanto también de la koinonía existente entre las Iglesias particulares.
· Progresiva absorción de los sínodos ordinarios bizantinos por el «endemousa» y luego por el sínodo permanente
La práxis sinodal provincial entró en crisis en el siglo V y no logró decolar más en modo satisfactorio. La razón parecería estar en la política de autocracia primacial, paralela a aquella del obispo de Roma, perseguida por el patriarca de Constantinopla. Dicha crisis comenzó de modo más explícito en la segunda fase de la crisis iconoclasta y continuó con más determinación después de 1054.
Al comienzo del siglo XIII, el originario sínodo endemousa se transformó en el que se llamó sínodo permanente. Ello ocurre seguidamente a la conquista de Constantinopla por parte de los Latinos. Entonces, muchos metropolitas abandonaron sus sedes para establecerse en la corte imperial refugiados en Nicea. En esta situación, emergieron los metropolitas-sinkellos que gozaban del derecho de representar a los otros metropolitas en el sínodo. Es así que, el sínodo que se reunía en trono al patriarca cesó de ser fluctuante en la composición de sus miembros y comenzó a trabajar en forma permanente. Cuando, con la conquista ottomana, los metropolitas pudieron regresar a sus diócesis, en sus puestos encontraron formando parte del sínodo permanente miembros del alto clero y laicos de la curia civil del patriarca, los cuales fueron sustituidos en la segunda mitad del siglo XVIII por un número limitado de metropolitas (se pasó de 4 a 12) que legítimamente representaban a todo el episcopado. Cuando, en ocasión de acontecimientos extraordinarios, participaban en los trabajos otros metropolitas o patriarcas, el sínodo permanente se reconstituía ocasionalmente como sínodo endemousa, el último de los cuales fue celebrado en 1872.

En la tradición Occidental

· Desde la victoria gregoriana a la victoria sobre el conciliarismo
Según Yves Congar la idea de colegialidad episcopal está casi ausente en la Iglesia occidental desde el siglo XI hasta el XV, provocada dicha ausencia -según él- por:
· el desarrollo llevado a cabo por la institución de los cardenales y la ideología que de ello se deriva: los cardenales suceden a los Apóstoles en tanto que estos, reunidos efectivamente en torno a Cristo, lo asistían y formaban un colegio; los obispos son sucesores de ellos, en tanto que están dispersos en diversas provincias después de pentecostés.
· la idea de colegio que se impone en los siglos XII y XIII: en este tiempo de intensa actividad de la ciencia canónica se concebía un colegio como una comunidad dotada de órganos comunitarios propios y frecuentemente incluido el reunirse físico en un mismo lugar. Ello llevó al hecho que la idea de colegialidad fuera monopolizada por el colegio de los cardenales;
· el desarrollo de la ideología papal, y seguidamente la reforma gregoriana y gracias a la ciencia canónica y a los teólogos del siglo XII, en el sentido y según los dos términos a los cuales Inocencio III ha dado su pleno y sistemático desarrollo: plenitudo potestatis et vicarius Christi. La misma actividad conciliar, que se lleva a cabo en occidente con menor intensidad que en oriente, no era otra cosa que expresión del poder papal. Las reacciones a la monarquía papal no lograron imponerse. Esas fueron vencidas por la victoria del papado sobre el conciliarismo (Concilio de Florencia 1438-1439 y por el Lateranense del 1512-1517 y por la teología de Torquemada y de Cayetano);
· de la victoria sobre el conciliarismo al Concilio Vaticano II.
Comienza a retomar vigor la idea de colegialidad, a partir del:
· Galicanismo
· Concilio Vaticano I
· Concilio Vaticano II